martes, 25 de agosto de 2009

DE COQUEROS, CACHIMBOS Y MARICONES

A Renato.

-"Es que no seas pendejo pues, aquí en Lima puedes ser de todo: ratero, borracho, coquero, pero nunca, maricón. Con eso si te jodes.
-Son huevadas, Renato. Vas a ver que yo, siendo como soy, voy a llegar bien lejos. Me voy a graduar de abogado y me voy a lanzar a la presidencia.
-¿Y yo seré tu primera dama o tu primer marido? –dijo Renato riéndose."



A Renato lo conocí cuando me inscribía al examen de admisión de la universidad. Yo postulaba a derecho y por cosas del destino, él también tuvo que hacerlo.
-¿Brother, sabes que mierda tengo que poner aquí? –me dijo.
-Creo que la carrera a la que postulas –le respondí confundido por su pregunta y sobre todo por sus enormes ojos azules.
-¿Tú a cual vas? –me volvió a preguntar.
-Puta, a Derecho creo –le dije.
-Okay, me caes bien asi que yo también voy a Derecho – me dijo.
Me reí.
-Te acabo de encontrar la vocación –le dije aun riéndome.
-Sí, me acabas de encontrar la carrera primo, te la debo. –me dijo también riéndose- Pero la huevada es ingresar ¿Sí o no?, además si ingreso, mi viejito me va dar su cañita pues.
-Puta que lechero eres. –le dije- Mi viejo ni siquiera sabe que voy a postular.
-Mejor huevón, si no ingresas no hay palta, en cambio mi viejo le ha dicho a todo el puto mundo –me dijo- Por cierto, ¿Cómo te llamas?
-Diego, ¿Y tú? – le dije dándole la mano.
-Renato, un gustazo Dieguito, ojala que ingresemos. –me dijo recibiendo mi saludo y mirándome fijamente.
Luego intercambiamos celulares, correos y quedamos en vernos pronto, pero estuve tan preocupado en el ingreso que me olvide de Renato y supongo que él también de mí. Ojala que Renato ingrese, pensaba echado sobre mi cama un día antes del examen.
Así fue. Un domingo a las seis de la tarde me entere que Renato y yo habíamos ingresado.
¿Aló? -dije
-¿Aló, Dieguito?
-Sí, ¿Quién habla? ¿Renato? –pregunté.
-Claro pues huevas, que tal, ¿Ingresaste o no? –me dijo Renato.
-Sí causa, ¿Tú? –le dije.
-Lógico pe, si ese examen estaba regaladazo –me dijo- Creo que la pregunta más tranca fue en la que me pedían mi nombre.
Nos reímos.
-¿Qué te parece si para celebrar nos vamos a dar una vuelta en el carro de mi viejo? –me dijo.
-Mostro, ¿Pero puta, no sería mucha conchudez de mi parte? –le dije un poco avergonzado.
-Para nada hombre, vamos no mas, yo invito. Mis viejos se han largado a festejar y yo estoy aburridísimo –me dijo- Al toque, dame tu dirección.
Le di mi dirección y una hora después, cuadro su flamante carro frente a mi casa.
-¿Qué te paso en la cabeza, huevón? –le pregunté tratando de disimular la risa.
-El concha de su madre de mi viejo, causa, me ha cagado el pelo –me dijo Renato, mostrando su cabellera trasquilada- Sube causita, que hoy día la reventamos.
-¿A dónde vamos? –me preguntó.
-No sé, ni idea. –le respondí- no soy de salir mucho.
-Bueno entonces vamos a mi casa, pero antes ¿no conoces por donde venden vitaminas por aquí? –me dijo.
-Claro pues, yo tengo mi casero, anda de frente hasta el malecón –le dije.
-Ah carajo, también le entrabas a la huevadita –me dijo arrancando el carro- eres del deshueve Dieguito, vamos a ser un dúo de puta madre en la universidad.
Llegamos al malecón y compramos un par de paquetes de coca y marihuana. Luego fuimos rumbo a Miraflores por la costa verde.
-Siempre que me armo tengo que fumarme un troncho luego, sino no duermo nada, me quedo tiesazo, llorando como un huevón. –dije.
-Yo me tomo unas pastillas para dormir y a la mierda –dijo Renato.
-.A mi me han dicho que si tomas pastillas después de armarte te puedes cargar.
-Son huevadas, tengo cinco años de coquero y no me ha pasado ni mierda –me dijo Renato- mas bien, ve armándote un tronchito pues, que me estoy aplatanando.
Armé el troncho rápidamente, mientras la brisa del fecal mar limeño se colaba por la ventana semiabierta.
-Carajo, todo un profesional armando su troncho. –me dijo Renato fumando con fuerza- ¡Mierda, que rica esta la hierba!
Dio unas tres pitadas más y me lo pasó, luego terminé por acabarme el troncho.
-No hay como la canabis para relajarse –dijo Renato.
-A mi no me relaja, a mi las drogas me vuelven maricón, recontra maricón –le dije.
-¿No jodas? ¿Te gustan los hombres? –me dijo sorprendido, mientras el carro subía la cuesta hacía Miraflores.
-Sí, bastante. Sobre todo tú. ¿Te jode?
-No huevón, para nada. Si a mi también me pasa. Puta, yo pensaba que era el único.
-Que chucha vas a ser el único, si a medio Lima se le chorrea el helado. –dije- Lo que pasa es que todos son una sarta de cabros que no se atreven a aceptarlo. Se cagan de miedo.
-Es que no seas pendejo pues, aquí en Lima puedes ser de todo: ratero, borracho, coquero, pero nunca, maricón. Con eso si te jodes.
-Son huevadas, Renato. Vas a ver que yo, siendo como soy, voy a llegar bien lejos. Me voy a graduar de abogado y me voy a lanzar a la presidencia.
-¿Y yo seré tu primera dama o tu primer marido? –dijo Renato riéndose.
-Tú serás lo que quieras, mi amor –le dije besándolo, mientras cuadrábamos el carro frente a su enorme casa en la calle Porta.
Entramos a la casa. Era preciosa, parecía nueva.
-Límpiate bien las tabas y no toques nada, porque mi vieja es maniática de la limpieza –dijo Renato.
Caminamos hacia su cuarto. Renato prendió su radio, nos quitamos la ropa y nos echamos en calzoncillos sobre su cama. Renato trató de besarme.
-¿Y si vienen tus viejos? –le pregunté.
-Ni cagando, tienen hasta mañana –me dijo.
-Okay, pero ahorita no tengo ganas de cachar. Mejor otro troncho, ¿Qué dices?
-No, mejor probamos que tal esta el paquirri -dijo Renato, mientras sacaba la coca de uno de sus bolsillos y ayudado por su DNI aspiro un poco de coca.
Jalamos todo lo que pudimos. Teníamos la garganta seca, los labios partidos, nuestros rostros estaban completamente tiesos.
-Vamos a cachar –dijo Renato haciendo gestos extraños con los labios.
-No, Renato, mejor no –dije totalmente duro- me siento mal, me duele el pecho, creo que me va a dar un infarto.
-Calla huevón, no seas mariquita. –dijo Renato echándose sobre mi- Cachar duro es riquísimo, mira te voy a enseñar.
Renato y yo tuvimos sexo torpemente. Sinceramente no me gusto mucho, pero él pareció disfrutarlo.
-¿Te gustó? –me preguntó recostado sobre mi pecho. Estábamos sobre la cama, aún desnudos, yo me moría por meterme un tiro más. Le pedí la coca Renato y jalé todo lo que pude. Mi nariz estaba a punto de arder.
-No sé, creo que no –dije mientras se me quebraba la voz- me siento horrible huevón, me siento sucio, siento que soy un coquero de mierda.
-No seas huevón, pues compadre –dijo Renato apartándose de mí- Que huevada contigo, trata de no pensar en eso. Cuando estas en rebote es mejor no pensar en nada.
-¿Es que no te das cuenta? –dije llorando- Soy un maricón, un puto maricón coquero, y yo no quiero ser así puta madre, yo no quiero.
-Puta pero a mi me gustas así –dijo Renato besándome el cuello- me gustas así bien mariconcito, eres mi mariconcito rico.
Renato parecía estar hablando dormido, casi no se le entendía nada.
-¿Me quieres? –le pregunté.
-Cómo mierda, huevón –me dijo- sin ti no voy a poder aguantar la universidad.
Traté de sonreír pero no pude, tenía la cara rígida.
-¿Crees que nos graduaremos? –le pregunté.
-Si dejamos la coca, tal vez –me dijo Renato aspirando más coca- pero por ahora, no me interesa averiguarlo.
- A mi tampoco –le dije y lo besé.

Diego Granadino.

17 comentarios:

  1. Apología al mango a la coca jajaja

    felicitaciones px
    Derecho no?

    que vas a ser tu de abogaoo?

    Luisitoo

    ResponderEliminar
  2. ME GUSTÓ! ME GUSTÓ

    X CIERTO A QUE UNIVERSIDAD A?

    xIME (L)

    ResponderEliminar
  3. A la "UNIVERSIDAD FEMENINA DEL SAGRADO CORAZÓN".

    Mil gracias por leerme, Xime.

    Diego Granadino.

    ResponderEliminar
  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  5. Parece que se repite mi historia.
    Este es la clasica conversación de dos jovenes de diesiocho años.
    Buen tema, espero saber mas al respecto.

    Un gran saludo.

    Rodolfo Lara

    ResponderEliminar
  6. JAJA TARADO ESA ES UNA UNIVERSIDAD PARA MUJERCITAS AUNQUE BUENO, TU CREO Q SI ENTRARIAS NO? JIJI

    ABLA PUES A QUE UNI ENTRASTe? NO TE AGAS EL INTERESANTE!

    SE TE EXTRAÑA CHINO, UN BESOTE

    XIME (L)

    ResponderEliminar
  7. jAjAjA cOmO Lo vEnDeSA tU aMIgO
    pErO aVeR PrEsEnTa pUeZ No dIcEs Q Ta xUrrO?
    UnA fOtItO auNq sEa

    ResponderEliminar
  8. PlAcErEs dE lA vIdA!!! o La UnIvErSiDaD dE lA vIdA ;)


    DoNdE tA tU cAsErOo k Tb kIeRooo xD!!!

    ResponderEliminar
  9. koka - univerzidad - marikonez

    too tiene ke ver zi o no?

    buena hiztoria

    ResponderEliminar
  10. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  11. De putamadre!! Me gustaría te des una vuelta por mi blog. Saludos.

    ResponderEliminar
  12. parece el guion y la introduccion a una pelicula que tal ves prometeria mucho

    ResponderEliminar
  13. que daño, que podria decir ¿felicidades?

    ResponderEliminar
  14. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  15. La pelicula es buenisima. Me refiero a "no se lo digas a nadie".

    ResponderEliminar
  16. Copia a "no se lo digas a nadie"

    ResponderEliminar