lunes, 1 de junio de 2009

EL INTELECTUAL MEDIOCRE

A mí mismo, aunque no me lo merezca.

"Tal vez no gane ningún premio, pero le robará, de eso sí estoy seguro, unas cuantas lagrimas a mis padres y ese será mi mayor reconocimiento..."


Acabo de terminar de escribir el penúltimo capítulo mi novela. Nunca pensé que pudiese lograrlo, nunca pensé que me sería tan fácil. Ya esta próximo el final y eso en vez de alegrarme, me entristece. Quisiera tener mas anécdotas, memorias o simplemente ideas con las que pueda rellenar algunos capítulos mas de mi libro, pero no puedo (y ciertamente, tampoco quiero esforzarme), pues las no pocas drogas que he ingerido, las infinitas horas en las que pudiendo dormir no lo he hecho y esas ganas naturales que tengo de no hacer nada que sugiriera algo de esfuerzo, me lo impiden.
Desde los catorce años soñaba con escribir una novela y tal vez el culpable tan precoses delirios fue Vargas Llosa, que con su novela La tía julia y el escribidor, inició en mí una serie de procesos mentales difíciles de explicar, que me llevaron un día de enero, el del cumpleaños de papá, a decirle a toda la familia que sería escritor, que sería como Varguitas. Por supuesto, la noticia no fue bien recibida por la familia, que me incitaba desde que tengo uso de razón (ósea desde hace muy poco), a estudiar medicina, como todos los miembros de la familia. Mi papá fue el más reacio, con sus acostumbrados comentarios hirientes, trató de avergonzarme frente a la familia diciendo que los escritores eran unos ganapanes, viciosos, muertos de hambre y principalmente, y era lógico que esto resultara siendo lo peor, unos maricones. Esto, como casi todo lo que me han dicho mis padres, en vez de acomplejarme o asustarme, me impulsó a que discretamente siga leyendo al genial Vargas Llosa y a que en secreto intente escribir algunos cuentos, de los cuales, por culpa de mi padre, no ha quedado rastro alguno.
Papá fue muy drástico cuando se enteró que persistía con la manía de escribir, sabía de mi carácter obstinado y tenía que ponerle coto a esa locura, por eso, desapareció todas las novelas de Vargas Llosa de la casa (novelas que recién ahora y con una inversión elevada de dinero he podido volver a comprar), me quitó el acceso a la computadora y me inscribió a una serie de cursos de verano, que me permitirían, en su razonamiento, ocupar mi tiempo y olvidarme de mi nueva vocación. No lo logró, que me encuentre escribiendo estas líneas es un ejemplo de eso, pero esa acción pudo calmar la profunda excitación literaria que sentía en ese momento y la hizo descansar por meses hasta que el día en que murió mi abuelo, me prometí y le prometí a su cuerpo putrefacto, que volvería a escribir.
Mi abuelo no murió hace mucho, un año y medio tal vez, y con su muerte reavivo mis ganas de escribir, de escribir sobre él.
Me ha salido una novela de los cojones. No sé si es buena o mala, solo sé que me salió de adentro. Tal vez no gane ningún premio, pero le robará, de eso sí estoy seguro, unas cuantas lagrimas a mis padres y ese será mi mayor reconocimiento (o venganza), será el galardón que espero por años y será el estandarte con el que les demostraré a los incrédulos, que pese a todo pude ser escritor, tal vez uno malo, pues nunca estuvo en mi genética ser bueno en nada, pero escritor al fin.
Mi novela es el más grande tratamiento psicológico que me hayan realizado antes, es la carta más grande y ofensiva que le haya escrito a alguien y es sobre todo, el trabajo al que le he puesto mas empeño en mi vida y por ende el que más sacrificios me ha procurado. Sacrificios de toda índole, desde el más simple entretenimiento, hasta el tener que dejar de lado algún tipo de placer sexual, que es por supuesto de lo que más me arrepiento. A causa de esta novela también, mi devastado cuerpo se ha ensanchado sin medida y aunque muchas veces he tratado de ponerme a dieta, sentarme por horas frente a la computadora crea en mí un hambre voraz, que termina por destruir cualquier régimen alimenticio, y claro, en un tiempo no muy lejano, terminará por destruirme a mí.
Luego de esta novela no sé si tenga ganas (o vida) para escribir otra. No tendría nada que decir, todo lo que se me ocurre o lo que no, por eso miento, lo escribo aquí en este blog austero, que nunca tendrá los visitantes que tiene el del amigo Renato Cisneros, pero al cual recurro todos los lunes para emanciparme y para cumplir de a pocos ese sueño que me inquietaba hace algunos años, el de ser un escritor conocido.
He discutido, para variar, hace algunos días con papá. Él me recrimina, con argumentos discutibles, esa obstinación mía por escribir, por dejar de lado, momentáneamente, cualquier actividad académica, cualquier centro de estudios, y me ha pronosticado pitonisamente, con ese léxico envidiable que maneja, que seré “un intelectual mediocre”, cosa que no discuto ni discutiré, pues, aunque me apene, es verdad. No podría ser de otra forma siendo su hijo. Mi ascendencia genética me ha condenado a serlo. Pero la gran diferencia, papi, es que yo no estaré condenado nunca a ser algo que no me apetece ser. Seré siempre lo que quiera y a hora lo que quiero(o a lo que estoy condenado), aunque les duela, es a ser un intelectual mediocre, que es al fin y al cabo, mucho mas divertido que ser un padre fracasado.

Diego Granadino


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8 comentarios:

  1. Esperaremos ese libro!

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  2. gracias por colgar esta historia Diego. Merecia ser publicada.
    Luana

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  3. ESE LIBRITOO VA TAR PICANTEEEE JAJAJA

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  4. sigue asi yo tambien tengo un blog ys e q soy el escogido por la naturalesa y por la madre poeta para ser un poeta y esritor aunque mi pluma se va mas por lo poeta

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  5. Hola diego , volvi a tu blog , respecto a lo de tu padre tal ves tengas razon , no se si lo estas inventando pero tu y cualquiera tiene el derecho de ser lo que quiere ser , tu quieres ser escritor y mira , lo estas haciendo simplemente administrando este blog , tu gran paso ha sido esta novela que espero proximamente este publicada.

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  6. ObviiOq cOmpraré tu librO y lO qiierO autOgrafiiadO!! aunQe cOnOciiemdOte nO O haráz! =) jaj!!
    wenO ya qiizier Poder decirle a mii papá realmente q es lO QiierO para mi futurO!! perO nO pez!! =).. em fiim.. Graciaz x este textO , creO q es la mejOr d tOz y la única dOnd scribes cOn el cOrazOm!! esperO saber algO d ti.. nO muy lejOs..! =) Cuiidatee.. t qiere !!
    Jayce *

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  7. Curiosa escritura Diego, después de mucho tiempo que leo un blogs sin ínfulas de hombre Nieztcheano. Una crítica implícita. Al parecer eres un ser con un ligero llamado a las Musas, un vocabulario sencillo y una temática muy cotidiana. Tras aquel "prólogo" hay un llamado interesante.
    *****

    Código aElita...No comente al pueblo esta visita virtual. Suelo transgredir las reglas, dejando de lado la creación y centrándome en la crítica especializada. Escribir es algo curioso, pero criticar a partir de un cánon literario va más allá de la obstinación de ser escritor. Una realidad que pocos entienden.

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  8. Hola, Diego.
    Me estoy poniendo al dia de tus historias. Hace tiempo que no las leia. De ahi te comento unas cuantas mas.
    Cuidate, y sigue siendo asi: autentico.

    Te saludo, una ex-compañera de trabajo

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